Ikusgune

Ikusgune denuncia una campaña organizada de odio tránsfobo tras la polémica de los Udalekus de Bernedo

El Observatorio contra la LGTBI+fobia de Araba, Ikusgune, ha elaborado un informe en el que alerta sobre la existencia de una campaña estructurada y coordinada de odio tránsfobo y LGTBI+fóbico, desencadenada tras la polémica generada por los llamados Udalekus transfeministas de Bernedo. El documento, elaborado durante una semana de seguimiento intensivo en redes sociales, medios y foros digitales, advierte de la articulación entre sectores de ultraderecha y movimientos transodiantes (TERF) que utilizaron el caso para promover una narrativa de criminalización contra las personas trans.

Un informe que surge tras la polémica

Ikusgune comenzó la investigación el 25 de septiembre, tras la publicación de las primeras informaciones sobre los campamentos. Desde ese momento, el observatorio detectó una rápida expansión de discursos tránsfobos en redes y medios, y decidió elaborar un informe “riguroso y en profundidad” para contextualizar las narrativas de odio y desmontar la manipulación mediática generada en torno al caso.

Durante una semana, el equipo de Ikusgune monitorizó más de doscientos tuits, revisó contenidos en Instagram, TikTok y YouTube, y analizó

decenas de artículos y programas de televisión. El resultado: una red articulada de actores ultraconservadores, cuentas falsas y portavoces transodiantes que trabajaron de manera coordinada para amplificar el escándalo y atacar al colectivo trans.

De una denuncia anónima al linchamiento mediático

Según el informe, la cadena de acontecimientos se inicia el 27 de agosto, con una publicación anónima en Instagram en la que una madre denunciaba presuntas prácticas inadecuadas en el campamento. En los días siguientes, medios como El Común y El Correo difundieron versiones cargadas de sensacionalismo, con titulares como “Los monitores iban desnudos y se duchaban con nuestras hijas e hijos en el campamento”.

A partir de entonces, se generó una avalancha de mensajes tránsfobos que mezclaban odio, desinformación y ataques personales. Ikusgune documenta acusaciones de pederastia, insultos como “maricón de mierda” o “travesti pederasta”, y la difusión de imágenes que asocian las banderas LGTBIQ+ con la corrupción o el abuso infantil.

El informe dedica especial atención al linchamiento público de una persona integrante de la asociación organizadora, cuya identidad fue expuesta en redes y medios, generando un acoso masivo. “Este caso ejemplifica cómo las campañas de odio operan mediante la individualización de la violencia”, señala el texto.

El papel de la ultraderecha y los movimientos transodiantes

El análisis de Ikusgune muestra una convergencia entre la ultraderecha y los grupos feministas trans-excluyentes (TERF), que compartieron mensajes, imágenes y argumentarios casi idénticos. Estas redes —algunas con origen en comunidades de Reino Unido— replicaron estrategias internacionales de manipulación emocional: usar la defensa de la infancia como excusa para justificar la exclusión y el odio.

Las principales narrativas detectadas fueron:

  • Vincular los derechos LGTBIQ+ con la pedofilia.
  • Criminalizar la educación feminista y transfeminista como “adoctrinamiento ideológico”.
  • Presentar la diversidad sexual como una amenaza para la moral y la infancia.

Conclusiones: una estrategia organizada de deshumanización

El informe concluye que lo ocurrido con el caso de Bernedo no es un hecho aislado, sino parte de una campaña estructurada, sostenida y multicanal de discurso de odio tránsfobo y LGTBI+fóbico. Según Ikusgune, esta dinámica busca “erosionar los derechos de las personas trans, reinstalar valores excluyentes y legitimar la violencia simbólica y social bajo una supuesta defensa moral”.

El observatorio advierte que la difusión reiterada de este tipo de mensajes “traspasa la frontera entre la libertad de expresión y la incitación al odio”, y que las conductas observadas podrían tener relevancia penal según la legislación vigente sobre delitos de odio.

El odio no se combate con silencio, sino con más feminismo, redes de apoyo y educación en diversidad”, concluye Ikusgune, que reafirma su compromiso de seguir monitorizando la evolución del caso y acompañando a las personas víctimas de LGTBI+fobia en Araba.

 

Informe de Ikusgune: https://ikusgune.eus/files/2025/10/informe-inter-1.pdf