Lumagorri

Contagiar la sed de transformar

Con el final de las fiestas de Gasteiz recibíamos en nuestros mails, teléfonos, grupos de WhachApp… un artículo de Miquel Missé dando su opinión sobre la famosa conferencia de la Escuela Feminista Rosario de Acuña en Gijón, como siempre que llega a nuestras manos un libro o artículo de Miquel lo leemos con interés, pues en sus palabras, siempre marcadas por su respeto y elegancia, aportan visiones muy interesantes a los debates que tenemos encima de la mesa. Es conocida nuestra admiración por Miquel Missé y todo el interés que muestra en Gasteiz cada vez que viene.

El artículo, polémico, “no ofende quien quiere”, nos enseña varias cuestiones a tener en cuenta, en esta ocasión, y porque creemos que nos viene al pelo, vamos a escoger su último párrafo: “Las personas cis, las personas hetero, los hombres, esa es también nuestra gente y tenemos que reclutarla como sea en las filas de la lucha feminista y LGTBI, interpelarles con una propuesta amable, valiente, basada en ideas y no en identidades, y contagiarles de nuestra sed de transformar nuestra sociedad para vivir mejor. “

Decíamos que la palabras de Miquel son siempre leídas con atención, y esta ultima parte del artículo explica algunas de las ideas sobre las que a veces reflexionamos, porque somos conscientes que la transformación de la sociedad ni es labor exclusiva del colectivo LGTBI, ni son las reivindicaciones de este colectivo su único objetivo. En ese sentido, trabajar para incorporar a otros colectivos en la lucha feminista y LGTBI y contagiarles de esa sed de transformación debe ser vital si realmente estamos comprometides con esto último.

Dicho esto, cabe decir, que nuestras ultimas reflexiones, publicadas en esta misma web, bajo el títuloAlgunas reflexiones sobre el modelo de fiestas en Gasteiz” no se corresponden con la idea de contagiar la sed de transformación a agentes de las fiestas de Gasteiz, como por ejemplo los Blusas y las Neskas.

Es verdad que hay diferentes maneras de vivir las Fiestas, es verdad que las fiestas tienen espacios más amables que otros para con la diversidad sexo-génerica, es verdad que todavía hay infinidad de actitudes a las que debemos prestar atención e intervenir. Pero, con todo esto, es evidente también que no podemos hacer la misma lectura en 2019 que la que se ha hecho años atrás, porque es cierto, que aunque quede mucho camino que recorrer, el escenario ha empezado a cambiar, y esto ha ocurrido, entre otras cuestiones, porque hay quienes han tomado la determinación de hincar el diente a las agresiones machistas y LGTBIfobicas y a fomentar una visión no heteronormativa de los Blusas y Neskas, y esto es así porque hoy existe una comisión de Igualdad dentro de la comisión de Blusas y Neskas, una comisión con la que hemos podido compartir talleres, y que se han mostrado dispuestas a las alianzas de manera clara. Una comisión a la que conocemos y reconocemos el trabajo realizado.

Quizás nos dejamos arrastrar por las tripas, por aquellos espectáculos que todavía podemos ver en la calle, en medios de comunicación o redes sociales que nos espantan. Pero las reflexiones publicadas no atienden a las necesidades que tenemos, porque seamos sinceres, nos gustaran más las fiestas o menos, nos gustaran más los Blusas y las Neskas o menos,…. Disfrutemos como disfrutemos las fiestas, existe un interés común, vivir las fiestas sin agresiones, de manera sana y donde la diversión sea el único objetivo, y en este interés coincidimos tanto Lumagorri como la Comisión de Blusas y Neskas.

No acertamos ni en el tono ni en el momento de publicar estas reflexiones, y aunque demos algunas ideas a las que consideramos que hay que prestar atención, probablemente podíamos hacer uso de las alianzas que en este tiempo hemos ido tejiendo para abordar las cuestiones que nos preocupan de manera más constructiva y eficaz, provocando espacios de debate con los Blusas y Neskas.

Debemos hacer un ejercicio de autocrítica en las palabras escritas en el artículo antes mencionado, apostar por afianzar alianzas y crear nuevas. Seguramente, en el futuro, podamos seguir teniendo oportunidades para abordar estos debates en espacios más adecuados, con más tranquilidad. Para construir conjuntamente un modelo de fiestas más sano y divertido.